«Hoy, Costa Rica se viste de fiesta en un día histórico para los derechos humanos y la protección del medio ambiente», afirmó el canciller Arnoldo André sobre la decisión de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Por ese logro, André felicitó a los integrantes de la misión de Costa Rica ante la ONU en Nueva York por el trabajo articulado en favor de un ambiente limpio, saludable y sostenible.
El Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto destacó que la resolución fue adoptada con una mayoría de 161 votos a favor, ocho abstenciones y ninguna oposición, además de contar con más de 110 Estados Miembros co-patrocinadores.
La Misión Permanente de Costa Rica ante la ONU lideró junto a Eslovenia, Maldivas, Marruecos y Suiza el proceso de consultas intergubernamentales que inició en junio de 2022 con la presentación del proyecto de resolución titulado El derecho humano a un ambiente limpio, saludable y sostenible, indicó.
Al presentar el proyecto de resolución, la encargada de negocios a.i. de Costa Rica ante la ONU, Maritza Chan, recordó el largo proceso de desarrollo de este derecho, que se remonta a la Declaración y Plan de Acción de Estocolmo sobre el Medio Ambiente Humano de 1972.
Resaltó que el reconocimiento universal del derecho a un ambiente limpio, saludable y sostenible es más que oportuno, en el contexto de una triple crisis ambiental compuesta por el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación.
Además, tiene enormes impactos para el goce efectivo de los derechos humanos, en particular para las personas más vulnerables, señaló y apuntó que esta resolución busca respuestas poderosas y efectivas, basadas en derechos, que permitan cambios transformadores en la sociedad y en los países.
La cancillería tica sostuvo que la aprobación de ese derecho humano constituye también una demostración de que la ONU y el multilateralismo siguen vigentes y pueden cumplir frente a los desafíos presentes que sólo juntos pueden superarse.
Asimismo, agradeció el apoyo decidido y constructivo de los miembros de la comunidad internacional, Estados, sociedad civil, academia, y empresas, al reconocimiento de este derecho humano.
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