Este criterio forma parte de los programas europeos para paliar la situación energética en el continente emanada del conflicto en Ucrania y de las sanciones de occidente contra Rusia.
Scholz lamentó no contar con este oleoducto, que en su opinión debería haberse construido antes, ya que en la actualidad supondrá una contribución masiva para aliviar y aligerar la situación del suministro.
El canciller agregó que, por esta razón, defendió firmemente se aborde un proyecto así ante sus colegas de España, Portugal y Francia, así como ante la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen.
En ese sentido, el proyecto MidCat para tender un gasoducto desde España hasta el sur de Francia se detuvo hace unos años por considerarse económicamente inviable en su momento (también por el bajo precio del gas natural procedente de Rusia).
Sin embargo, en vista de la situación bélica, el gasoducto podría contribuir ahora a que Europa sea menos dependiente del gas ruso.
Las tuberías no están completas en un tramo de 226 kilómetros desde Hostalric (Cataluña), hasta Barbaira (Francia), obras que requerirían al menos dos años de plazo. España reclama que la Unión Europea (UE) financie la construcción.
Hasta ahora, solo hay dos gasoductos más pequeños desde España a través de los Pirineos hacia el norte, con una capacidad total de ocho mil millones de metros cúbicos al año.
En comparación, el Nord Stream 2, proyecto destinado a transportar gas ruso hasta Alemania a través del mar Báltico y que se detuvo a causa del conflicto, tiene una capacidad de al menos 55 mil millones de metros cúbicos.
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