De acuerdo con la televisión en esta capital, tales declaraciones las realizo el funcionario durante una reunión del Gobierno.
En la misma, Kurti tambien anunció la introducción de tarjetas de migración que, desde el punto de vista de Belgrado, serán el primer paso para reemplazar las de identidad con documentos redactados de acuerdo con las normas del estado no reconocido.
Anteriormente, autoridades de Kosovo informaron a los residentes del norte de Kosovo y Metohija sobre las nuevas normativas relacionadas con los serbios en la demarcación.
Durante la noche del 31 de julio, la situación en el area se intensificó, después que la policía de la entidad no reconocida cerrara el puesto de control en la línea administrativa con Serbia, con la intención de prohibir los documentos serbios a partir del 1 de agosto.
En respuesta, los serbios de la parte norte de Kosovo se manifestaron y bloquearon las principales carreteras.
Las sirenas sonaron en varias ciudades del norte de la región.
Policías y miembros de las Fuerzas Internacionales de Seguridad en Kosovo, que operan bajo los auspicios de la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN), fueron atraídos al puente sobre el río Ibar, que conecta el norte y el sur de Kosovska Mitrovica.
El resultado de los esfuerzos internacionales fue la decisión de Pristina de posponer el procedimiento para imponer la prohibición de los documentos serbios hasta el 1 de septiembre.
Kosovo, poblado mayoritariamente por albaneses, proclamó en 2008 una independencia unilateral, reconocida por Estados Unidos, Canadá y la mayoría de los países miembros de la Unión Europea, pero no por Serbia, Rusia, China, España, Grecia, Irán y otras naciones.
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