«La agencia se abstiene de nombrar a los culpables, también por el hecho de que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) no tiene representantes en Zaporozhie. Quizás algo cambie para bien durante la misión, porque los expertos de la organización y sus directivos podrán ver lo que realmente ocurre”, detalló el diplomático en entrevista con TASS.
Uliánov precisó que la parte rusa proporciona a la Secretaría del ente y a los Estados miembros información sobre la situación en la central y «los momentos peligrosos y alarmantes» que se registran en el lugar como resultado de las acciones de la parte ucraniana.
En ese sentido, puso como ejemplo que la instalación atómica fue atacada por drones kamikaze en julio y con cohetes y artillería pesada en agosto. “Enviamos toda esta información al OIEA. Nuestra información se tiene en cuenta en el trabajo de la agencia, incluso en sus mensajes informativos», añadió. Asimismo, el representante de Rusia señaló que el tono de las declaraciones del director general del OIEA, Rafael Grossi, «se ha vuelto alarmista» en el contexto de los últimos acontecimientos.
«Grossi insiste regularmente en que los ataques contra la planta pueden provocar graves situaciones de emergencia», recalcó.
En otro momento de las declaraciones, el diplomático ruso añadió que hasta la fecha el Departamento de Seguridad de la Secretaría de Naciones Unidas no pudo explicar claramente por qué bloqueó en el último momento la visita de la delegación del OIEA a la central nuclear de Zaporozhie pautada para junio.
El 3 de junio, la parte rusa y el liderazgo del organismo acordaron la ruta y el cronograma de la misión internacional de la agencia a la planta atómica, la cual estaría encabezada por su máximo directivo, sin embargo, la acción fue interrumpida por la ONU, sin dar explicación.
Desde principios de agosto, las Fuerzas Armadas de Ucrania realizan varios ataques contra la central nuclear de Zaporozhie, ubicada en la ciudad de Energodar, la más grande de Europa.
Desde 1996, la instalación es una división independiente de la empresa nacional de generación de energía nuclear Energoatom, controlada por Ucrania. En marzo de 2022, tras el inicio de la operación militar de Moscú en territorio ucraniano, todas las áreas de la planta son controladas por las fuerzas rusas.
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