Tal acuerdo quedó sellado luego de un encuentro en Brasilia entre el embajador Guillermo Carmona, secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina, y Flavio Viana Rocha, secretario brasileño de Asuntos Estratégicos.
Zopacas surgió en 1986, a iniciativa brasileña, como organización consultiva de carácter transcontinental, integrada por 24 naciones situadas a ambos lados del Atlántico y con el respaldo de la Asamblea de las Naciones Unidas.
Está conformada por Argentina, Brasil y Uruguay, junto a otros países africanos: Sudáfrica, Angola, Benin, Cabo Verde, Liberia, Namibia, Nigeria, República Democrática del Congo, Sao Tomé y Príncipe, Senegal, Sierra Leona y Togo.
Medios periodísticos indican que a raíz de su breve visita al gigante suramericano, Carmona agradeció a Brasil por posicionarse a favor de Argentina en su reclamo por la soberanía de las Islas Malvinas ante el Comité de Descolonización de la ONU.
«Esto es un mecanismo que se estableció con resoluciones de ONU para preservar el Atlántico Sur de armamento nuclear y de militarización y ha sido un espacio de cooperación importante», señaló.
Comunicó que «en noviembre se convocó a reunión de ministros y hay una amplia agenda que involucra a temas de defensa, conservación de los mares, políticas pesqueras y cooperación científica».
El diplomático precisó además que su visita a Brasil forma parte de una agenda mayor «que tiene una prioridad puesta en Malvinas, es una prioridad de política exterior además de ser política de Estado y causa nacional».
Insistió en que «siempre tratamos de poner a Malvinas en el contexto de un triángulo estratégico vinculado al Atlántico Sur y lo Antártico».
Brasil, junto a Bolivia, fueron los primeros países en protestar, en 1993, por la ocupación del Reino Unido sobre las islas.
Durante una entrevista con un medio chino en abril pasado, Carmona también resaltó que la disputa por las Malvinas con el Reino Unido, no es una causa solo de su país, sino también global.
«Esta situación nos lleva a considerar que las Malvinas no son solo una causa nacional argentina, sino una causa regional y global contra el colonialismo que el Reino Unido apoya en parte de nuestro territorio», denunció.
Recordó que los países negociaron varias veces sobre la cuestión de la soberanía, pero Londres interrumpió las conversaciones en 1981.
El político argentino tiene en agenda impartir mañana una conferencia abierta en la Universidad de Brasilia sobre asuntos estratégicos de la política exterior de su país.
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