El detonante de los choques armados entre las tribus berti y hausa fue un desacuerdo sobre la creación de una «autoridad civil que supervise el acceso a la tierra”.
En los enfrentamientos en el estado de Nilo Azul, fronterizo con Etiopía, 63 personas murieron y otras 163 resultaron heridas, 13 de ellas graves, según cifras oficiales.
Tras el golpe de Estado militar ocurrido en Sudán el pasado 25 de octubre, los episodios de violencia resurgieron en el entramado político y social del país, gobernado ahora por una junta castrense.
Los hausas son uno de los grupos étnicos mayores de África, con decenas de millones de miembros asentados en varios países.
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