Estas declaraciones tienen lugar ante los hechos de ocupación de predios en algunos sectores de esta nación suramericana como en Cauca, César y otros departamentos.
En tal sentido, Márquez subrayó que el gobierno respeta las leyes del país y la institucionalidad.
«Quienes quieren promover invasiones entorpecen la gestión del Gobierno y esto podría redundar en que sean investigados por parte de las autoridades», señaló la mandataria.
Aseguró que la nueva administración está dispuesta a saldar la deuda histórica que existe en Colombia con quienes quieran acceder, mediante el diálogo, pero no con la violencia a este proceso de democratización de la propiedad.
Seguimos con nuestro compromiso del logro de la paz para Colombia, de la justicia social y la convivencia pacífica, dijo la vicepresidenta y destacó que el programa de gobierno establece el avance hacia la igualdad de los derechos de todos los colombianos y colombianas.
Asimismo, reiteró el compromiso de entregar al congreso un proyecto de ley que avanzará con la reforma agraria integral que el país necesita.
Como gobierno hemos dicho que las propiedades que se encuentran en poder de la Sociedad de Activos Especiales se destinarán a las personas más vulnerables, quienes se encuentran en zonas de alto riesgo, cooperativas, mujeres y jóvenes emprendedores, señaló.
Esto implica un proceso que se debe surtir, en la medida en que muchas de estas propiedades están en procesos de extinción de dominio y, también, se debe hacer un análisis para la entrega de estos predios a quienes más lo necesitan, enfatizó el gobierno.
Colombia ha sufrido varios periodos de violencia, en los siglos XIX y XX, que aún persisten, y la mayoría tienen sus raíces por el problema de la tenencia de la tierra.
Ellos trajeron consigo pobreza aguda del campesinado y violencia estatal, factores que han conducido a que en muchas ocasiones los trabajadores del campo tomen las armas en defensa de sus vidas, bienestar social y económico y se mantenga el ciclo de la guerra.
El primer punto del Acuerdo de Paz firmado entre el gobierno de Juan Manuel Santos y la entonces Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia plantea en su primer punto hacer una reforma agraria, con el objetivo de eliminar las causas que originaron la guerra.
Sin embargo, durante el mandato de Iván Duque (2018-2022) ese punto sigue sin concretarse y la reforma agraria nunca se llevó a cabo.
El presidente Gustavo Petro prometió desde su campaña electoral cumplir con los acuerdos, lo cual reiteró hoy la vicepresidenta.
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