Según esa agencia de noticias, Brenda Uliarte, quien usaba Ámbar como nombre falso, fue arrestada en la estación Palermo del Tren San Martín, tras una orden de la jueza María Eugenia Capuchetti, a cargo del caso.
Luego de que Sabag disparara sin éxito a la expresidenta, Uliarte intentó distanciarse de él y aseguró ante la televisión local estar desconcertada y desconocer la existencia de dos cajas con 50 balas cada una en el domicilio de su novio.
La detención de la mujer de 23 años se produjo después de que Capuchetti dictara secreto de sumario y tras analizar imágenes de cámaras de vigilancia ubicadas en las proximidades del domicilio de la también titular del Senado, donde ocurrió el ataque.
Uliarte, una supuesta vendedora de algodones de azúcar, aseguró que hacía días no veía a Sabag, pero fue grabada junto a él, el mismo día de los hechos.
Esta jornada fueron tomadas las declaraciones de un conocido del atacante y de peritos que intentaron extraer información de su celular, el cual mostró el cartel de “reseteado de fábrica” por razones desconocidas.
Alrededor de las 21:00, hora local, del jueves Sabag, de 35 años y nacionalidad brasileña, apuntó con una pistola a la cabeza de Fernández cuando ella saludaba a personas reunidas en las afueras de su casa en el capitalino barrio de Recoleta.
Aunque apretó el gatillo, el arma, que contaba con cinco balas, no se disparó.
Tras ser detenido por ciudadanos y miembros de la seguridad de la exjefa de Estado, Sabag fue arrestado por la Policía y un examen médico determinó su capacidad para ser interrogado.
No obstante, se negó a declarar y a entregar la contraseña de su teléfono.
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