En un mensaje en su cuenta oficial en Twitter, el titular de la Organización de Naciones Unidas (ONU) enfatizó en que ese país africano está en un punto de inflexión y millones de habitantes enfrentan niveles extremos de hambre aguda.
Hace dos días, el organismo internacional denunció que, a más de un año de advertencias sobre las insostenibles cifras de hambrientos en Somalia, siguen sin resolverse los fondos necesarios para cubrir la emergencia.
La insuficiencia de alimentos está focalizada en el centro-sur de ese territorio y las mujeres, en particular las embarazadas y lactantes, así como los niños menores de cinco años, aparecen entre los más vulnerables, precisó la ONU.
«Es probable que la hambruna y la muerte ya estén ocurriendo», alertó, y recordó lo sucedido en 2011, cuando casi la mitad de las más de 250 mil personas que murieron de inanición eran infantes.
La organización estima que parte de ese país será golpeado por una fuerte hambruna entre octubre y diciembre de este año, a raíz de la sequía y el aumento de los precios mundiales.
Según reportes de Naciones Unidas, unos 20,5 millones de personas en el Cuerno de África están sumidas en «una crisis de hambre nefasta y totalmente evitable», lo cual los expertos consideran inaceptable.
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