Las delegaciones encabezadas por los secretarios del Exterior Marcelo Ebrard y de Estado, Antony Blinken, e integradas por jefes de varios despachos ejecutivos, enfocaron el trabajo en cuatro pilares centrales, según el comunicado conjunto emitido al finalizar el diálogo.
El primero de ellos lo titularon Reconstruyendo juntos, el siguiente Promoción del desarrollo económico y social sustentable en el sur de México y Centroamérica, el tercero Asegurando las herramientas para la prosperidad futura, y el último Invirtiendo en nuestros pueblos.
Al margen de esos temas centrales también abordaron nuevas áreas de colaboración, incluyendo combatir los retos del cambio climático como el uso de transporte ecológico en la frontera y la electro movilidad.
En cuanto a reconstruir juntos, las partes acordaron colaborar para mejorar el clima de negocios y fortalecer la resiliencia de cadenas de suministro entre los dos países.
Frente al cambio climático aceptaron acelerar la transición a energías limpias, particularmente mediante la adopción de vehículos de cero emisiones.
De la misma manera, la Ley de Reducción de la Inflación –la legislación más significativa en cambio climático de la historia estadounidense– incluye 369 mil millones de dólares para reducir las emisiones y detonar la demanda de vehículos eléctricos y tecnologías de energías limpias.
Respecto de la promoción del desarrollo sostenible en el sur de México y Centroamérica, pactaron cooperan para promover el entorno empresarial y la calidad de vida de la región a través de la creación de empleos y oportunidades en El Salvador, Honduras, Guatemala y el sur mexicano.
Sobre el tercer punto, la prosperidad económica futura, coincidieron en la necesidad de adoptar herramientas que coadyuven a crear una compatibilidad regulatoria y la mitigación de riesgos en los sectores de tecnologías de la información y comunicaciones, ciberseguridad, telecomunicaciones e infraestructura.
Finalmente, en lo relacionado con la inversión hicieron énfasis en la cumbre bilateral que se realizará en octubre de este año y las metas de las autoridades laborales y educativas de ambos países de compartir mejores prácticas sobre programas de aprendices, y educación vocacional y técnica.
Por lo tanto, seguirán comprometidos con la construcción de una fuerza laboral más inclusiva que reconozca que todos los ciudadanos deben beneficiarse del crecimiento económico común.
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