De acuerdo con la norma suscrita por el presidente de la República, Laurentino Cortizo; y el ministro de Salud, Luis Francisco Sucre, se elimina el distanciamiento físico y el aforo en los lugares de gran concurrencia, las cuales se mantuvieron para evitar el incremento de casos por la dolencia.
Además la disposición establece que no se solicitará el código QR e hisopados a los viajeros que ingresen al país.
En medio de una quinta ola de la Covid-19, el pasado 11 de julio una disposición similar puso fin al uso obligatorio de la mascarilla en espacios cerrados.
Sin embargo, el Ministerio de Salud (Minsa), como rector de las políticas sanitarias del Estado, reiteró a la población mantener las medidas de autocuidado y el uso de la mascarilla en lugares multitudinarios como una vía preventiva, sobre todo en las personas mayores de 60 años y de las que padecen enfermedades crónicas.
Igualmente recalca la importancia a la población de completar su esquema de vacunación contra la Covid-19 y además aplicarse sus dosis de refuerzo, inyecciones que han demostrado ser efectivas y seguras.
El decreto se sustenta en los resultados positivos en el control de la enfermedad y el Programa Ampliado de Inmunización que se traducen en una disminución significativa en los indicadores de letalidad y hospitalización, precisa el texto.
Sin descuidar la vigilancia y el control de la situación sanitaria, agrega el documento, esta medida está dirigida a reactivar la economía nacional, que venía en un proceso de franca recuperación tras el mayor impacto del brote a partir de marzo de 2020.
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