Desde la ciudad de Soyo, en la provincia de Zaire, el medio de prensa recogió las opiniones de visitantes europeos y sudamericanos gratamente impresionados por la historia y las bellezas naturales de aquel municipio, en el extremo noroeste del país.
Entre las plazas más atractivas, mencionaron a Ponta do Padrão, donde desembarcó el navegante portugués Diogo Cão en su primera expedición a África, en 1482, y el Porto do Mpinda, que en 1491 recibió a los primeros misioneros católicos, dando inicio así a la evangelización cristiana en la región subsahariana del continente.
Los entrevistados consideraron, además, la importancia de fomentar las investigaciones etnográficas, con miras a atraer más turistas, especialmente académicos, interesados en el tema.
En declaraciones a Angop, el portugués Pedro Pinheiro sopesó las numerosas ventajas invertir en la valorización del patrimonio local desde el punto de vista socioeconómico, incluidos la generación de renta y empleo.
Por su parte, el brasileño João Melo dijo sentirse encantado con la belleza de los paisajes de Soyo, donde sobresalen los manglares a lo largado del cauce del río Zaire y las playas.
La mayor apuesta debe estar en la construcción de infraestructuras en lugares históricos y culturales de la región, a saber, Ponta de Padrão, Missão do Mpinda, Porto Rico, Porto do Mpinda, Pedra do Feitiço, entre otros, indicó el despacho.
De acuerdo con registros arqueológicos, la Pedra do Feitiço está asociada a la cultura bantú y se cree que la roca fue empleada en la cura de enfermos, de ahí el apodo de piedra del hechizo, en las proximidades del río Zaire.
El presidente del grupo Shochot, del ramo turístico y hotelero en Soyo, Paulo Vasco, subrayó la necesidad de que los bancos comerciales sean más flexibles ante las necesidades de los empresarios, financiando distintos proyectos, refirió Angop.
Su empresa, respondió, podría invertir en el área de Ponta de Padrão, siempre que exista incentivo institucional y apertura de la banca, pues el proyecto precisa obras de ingeniería, las cuales resultan costosas.
Desde el punto de vista turístico, Zaire también tiene el privilegio de contar con los Vestigios de Mbanza Kongo, la capital del antiguo Reino del Kongo, incluida en 2017 en la lista del patrimonio mundial por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
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