Según sus informes, el edil Conrado Mendoza y su padre, exedil Juan Mendoza, fueron acribillados a tiros en su propio domicilio, luego de lo cual la banda de criminales se trasladó en una camioneta hacia la sede municipal de San Miguel Totolapan y mató a otras 16 personas. Hay, además, dos heridos graves.
Los primeros reportes señalan que los hechos ocurrieron alrededor de las 15:00 hora local, y el comando criminal, después de ultimar a los políticos, se dirigió al ayuntamiento y realizó cientos de disparos contra el edificio con el mencionado saldo de víctimas.
Versiones no confirmadas indican como presuntos autores de la masacre a la banda Los Tequileros, cuyo lugarteniente murió en otra balacera con comunitarios.
Las autoridades confirmaron que fueron varios los enfrentamientos registrados en la cabecera municipal de San Miguel Totolapan.
La Coordinación para la Construcción de la Paz en Guerrero indicó que se reforzó la seguridad en el municipio con elementos de la policía estatal, Secretaría Nacional de la Defensa, Guardia Nacional y Marina, así como de la Policía Ministerial de la Fiscalía General de Estado.
Poco antes de la incursión armada, supuestos integrantes de Los Tequileros dieron a conocer un video en el que anunciaban que «estaban de regreso» en dicho municipio, el cual tomarían bajo su control y retaban a que las autoridades los volvieran a sacar.
El grupo se reactivó cuatro años después de haber sido desmantelado, ya que en febrero de 2018, su principal dirigente, Raybel Jacobo de Almonte, fue aniquilado en un enfrentamiento con integrantes del Frente Unido de Policías Comunitarios del Estado de Guerrero, en la sierra de Tlacotepec.
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