También confirmaron otra muerte institucional por lo que suman dos fallecimientos oficiales, además de los siete reportados el fin de semana a nivel comunitario.
El informe señala igualmente que 51 de los 111 casos sospechosos tienen menos de 19 años y 27 de ellos no cumplieron los cinco años.
El brote continúa concentrado en la capital, especialmente en las comunas de Cité Soleil y Puerto Príncipe, con 41 y 55 pacientes sospechosos, respectivamente, no obstante, se registran al menos dos casos en Mirebalais, en el departamento Centro.
Este jueves la Organización de Naciones Unidas alertó que el brote aún puede contenerse si se establece un corredor humanitario para la salida del combustible de la terminal Varreux que alimente los hospitales y permita reanudar la potabilización del agua.
Desde mediados de septiembre grupos armados bloquean el acceso al principal depósito de hidrocarburos del país, lo cual recrudeció la escasez de combustible que sufre Haití desde inicios de año.
La falta de combustibles obligó el cierre de hospitales, centros de salud y empresas, además de ralentizar las actividades económicas y posponer el reinicio del año académico.
La víspera el primer ministro Ariel Henry pidió asistencia a la comunidad internacional y abogó por el diálogo y la humanidad para evitar que Haití se hunda en una crisis sin precedentes.
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