En ocasión del Día Mundial del Algodón, el alto funcionario de la Organización Mundial del Comercio (OMC) resaltó las dificultades a las que se enfrentan los productores de esa fibra vegetal en África y en otros lugares, en particular el cambio climático, la pandemia de la Covid-19, las interrupciones de la cadena de suministros y la crisis alimentaria.
Subrayó que los altos precios de los alimentos y las consecuencias de la guerra en Ucrania dejan a muchos países cultivadores de algodón con una doble carga: sus exportaciones como fuente de ingresos externos penalizadas y sus importaciones cotizan a precios casi prohibitivos.
También comentó que la OMC adopta medidas para responder a la crisis alimentaria, como prioridad número uno, en tanto destacó su papel para garantizar la transparencia respecto a las restricciones del comercio implementadas por los gobiernos.
Recordó que desde el inicio del conflicto en Ucrania, 31 países introdujeron 61 acciones prohibitivas del comercio de alimentos y piensos y siete medidas sobre fertilizantes, aunque al menos 15 ya se eliminaron.
Además, se adoptaron 46 medidas para facilitar las importaciones de alimentos, piensos y fertilizantes por 25 naciones, no obstante la situación es aún muy volátil.
Paugam hizo hincapié en la importancia de las negociaciones de la OMC para la seguridad alimentaria y el algodón, sobre lo cual destacó el logro de una respuesta de emergencia a la falta de alimentos y un acuerdo histórico para frenar los subsidios perjudiciales a la pesca.
Por último, llamó la atención sobre la asistencia técnica y la ayuda a los cuatro del Algodón (Benin, Burkina Faso, Chad y Malí) y otros productores en desarrollo.
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