Mediante un informe, circulado en esta capital sursudanesa, la organización no gubernamental (ONG) Save the Children declaró que el empeoramiento en los últimos tiempos de la situación climatológica dejó un saldo de más de 900 mil damnificados.
Hizo hincapié también en que debido a las inundaciones, los conflictos intercomunitarios y la inflación en la economía local, en este país se estima que padecen desnutrición alrededor de 1,4 millones de menores de edad, los cuales, en su opinión, deben ser protegidos.
Tras llamar a la comunidad internacional a aportar suficientes fondos para encarar la actual crisis alimentaria en Sudán del Sur, la ONG insistió en que no se le debe fallar a la generación de niños y niñas que crece ahora en este territorio.
En marzo pasado el Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas avisoró que cerca del 70 por ciento de los pobladores de esta nación sufrirán este año hambre extrema por causa de los desastres naturales y la violencia.
Sudán del Sur, país que obtuvo su independencia de Sudán en 2011, además de una persistente crisis económica y política, sufre las secuelas de una guerra civil de casi cinco años que causó la muerte de más de 350 mil personas.
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