Al recibir al diplomático saudita en el Palacio de Baabda, el mandatario libanés destacó el apoyo del Reino a la nación, especialmente en los planos social y humanitario.
Por su parte, el embajador Al-Bukhari reiteró el entusiasmo de Arabia Saudita por la unidad del Líbano, su pueblo y profundidad árabe, sobre la base de los principios de la carta nacional contenidos en el Acuerdo de Taif de 1989 que puso fin a la guerra civil (1975-1990).
En este sentido, el jefe de la misión saudita en Beirut destacó la disposición del presidente Aoun de activar los vínculos entre Líbano y el Reino en beneficio de los dos pueblos hermanos.
Minutos después, el embajador saudita intercambió con el titular del Parlamento libanés, Nabih Berri, sobre la situación general del país y los últimos acontecimientos regionales.
A fines de abril pasado, Arabia Saudita y Francia firmaron un fondo de apoyo al pueblo del Líbano consistente en más de 30 millones de dólares con el objetivo reforzar la seguridad alimentaria, salud, educación, energía y agua.
Líbano enfrenta una devaluación sin precedente de la moneda local frente al dólar estadounidenses, alzas enormes en los precios del combustible, las medicinas y otros artículos básicos que arrastran a cuatro de cada cinco ciudadanos a la pobreza.
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