A la sesión legislativa acudieron 114 diputados y el fantasma del consenso volvió a matizar el plenario, luego de que ningún candidato pudiera obtener las dos terceras partes de los votos requeridos.
El parlamentario Michel Moawad apareció nuevamente entre los postulantes y recibió 39 boletas a su favor; en tanto, Issam Khalifa obtuvo 10, en 13 papeletas los diputados escribieron el nombre de Nuevo Líbano, 50 votos quedaron en blanco y dos fueron canceladas.
Cuando resta una semana para el fin del plazo constitucional, la ausencia de quórum evidenció la fragmentación y discrepancias políticas entre los bloques parlamentarios.
Ante este escenario, el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, convocó para el venidero jueves la quinta sesión presidencial a fin de designar al nuevo miembro de la comunidad cristiana maronita en asumir el cargo de jefe de Estado.
Según la Constitución, en la ronda inicial de votaciones, el candidato debe obtener dos tercios o 86 sufragios para ganar; en tanto, de acudir a segunda vuelta el postulante requiere de la mayoría de 65 votos.
En caso de vacancia, las funciones del mandatario serán delegadas en el Consejo de Ministros, de conformidad con el artículo 62 de la carta magna.
Líbano intenta nombrar al presidente de la República número 14 después de la independencia antes del 31 de este mes, fecha límite de la gestión del actual jefe de Estado, Michel Aoun
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