La Agencia Nacional de Emergencias (Nema) reveló mediante un informe actualizado que del total de afectados más de un millón 427 mil fueron desplazados, en tanto 181 mil 600 residencias resultaron dañadas y otras 123 mil 807 totalmente destruidas.
Tras advertir que la situación alimentaria puede empeorar en algunos lugares afectados por las inundaciones, el organismo de socorro indicó que miles de hectáreas de cultivos fueron arrasadas en medio de los torrenciales aguaceros.
El gobierno federal de Nigeria aseguró en las últimas horas que personas en 21 estados afectadas por los vendavales, entre ellos Abia, Adamawa y Anambra, reciben diversas ayudas, entre ellas, productos alimenticios como arroz, maíz y aceite vegetal.
Sitios Web digitales reseñaron que las inundaciones en este país se asocian, entre otros factores, al cambio climático, el desbordamiento de ríos, la apertura de presas, malas prácticas de planificación urbanas y deficientes sistemas de drenaje.
Mientras en el territorio nigeriano abundan las excesivas precipitaciones, en otros estados africanos como Somalia golpea la sequía, lo cual demuestra los efectos de la variación del clima, fenómeno que pone en riesgo la seguridad alimentaria de las comunidades.
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