Fue un homenaje al cantante, compositor y guitarrista uruguayo, considerado entre los mayores exponentes del canto popular de su país, con gran reconocimiento en América Latina.
Canciones y anécdotas revivieron al artista, cuya obra estuvo asociada a las luchas populares en Uruguay y el resto del continente.
Danie Denoir, Mauricio Ubal, Patricia Robaina, Rubén Olivera y Washington Carrasco, conocidos músicos, compositores o intérpretes uruguayos, protagonizaron el homenaje, en el cual predominó el acompañamiento con guitarra, al estilo Viglietti.
Su obra se radicalizó con las injusticias de su tiempo y que prevalecen hoy.
Fue encarcelado en 1972 como parte del ambiente represivo que llevó a la dictadura militar del año siguiente y extendida hasta 1985.
El reclamo de su liberación involucró la participación de destacados políticos e intelectuales de la época.
Vivió en el exilio en Argentina y Francia y sus composiciones se publicaron a su regreso a Montevideo, el 1 de septiembre de 1984, cuando fue recibido por miles de compatriotas.
Viglietti realizó una intensa tarea de investigación, preservación y difusión de la música latinoamericana.
Durante años construyó un extenso archivo musical al que denominó Memoria Sonora de América Latina, que incluye, además, entrevistas a músicos y escritores realizadas en un lapso de 40 años de trabajo.
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