El documento que conducirá la postura de los legisladores del FA sobre el tema, considera que la del Ejecutivo «no es una reforma de la seguridad social, resulta incompleta y «descarga el peso de sus costos exclusivamente sobre las espaldas de las trabajadoras y los trabajadores».
Señala que la iniciativa, que analizará un comité del Senado, tampoco contempla la necesidad de nuevos ingresos para financiar el sistema, ni la inequidades actuales.
«Con esta reforma la mayoría de las personas van a tener que trabajar más tiempo y jubilarse con menos ingresos», subrayó el Frente Amplio.
No es posible reformar un área tan sensible con un trámite exprés y de espaldas a la gente, criticó la oposición, que reclama un «debate riguroso y profundamente democrático» acerca de la reforma de la seguridad social.
La postura frenteamplista parte del análisis del proyecto reformatorio que aprobó la coalición gubernamental, en la que incluso asoman diferencias sobre cómo mejorarla.
El FA dio cuenta de un análisis propio en el que trabajaron expertos en los dos últimos años.
«La reforma necesaria requiere sustentabilidad financiera y social. Cuenta nuestro país con el Frente Amplio para aportar en ese camino a la reforma que Uruguay necesita», concluyó el texto.
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