Según el informe publicado este lunes, los principales aumentos se registraron en la energía, cuya tasa de precios alcanzó un 41,9 por ciento, seguida por los alimentos, el alcohol y el tabaco, que marcaron una subida del 13,1 por ciento.
Mientras, los valores de los bienes industriales no energéticos avanzaron un seis por ciento en octubre y los de los servicios subieron un 4,4 por ciento.
Eurostat apuntó además que la inflación subyacente -que excluye el efecto de los componentes más volátiles como la energía y los alimentos frescos- creció cuatro décimas, hasta el 6,4 por ciento.
En un análisis por países, las mayores tasas de inflación el décimo mes del año se reportaron en Estonia (22,4 por ciento), Lituania (22 por ciento), Letonia (21,8 por ciento) y Países Bajos (16,8 por ciento).
Por el contrario, las caídas más marcadas se anotaron en Francia (7,1 por ciento), España (7,3 por ciento) y Malta (7,5 por ciento).
En ese contexto, crecen las expectativas entre los operarios del mercado sobre nuevas subidas de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE), ya que las presiones sobre los precios parecen estar ampliándose
El organismo bancario subió los tipos de interés un total de 200 puntos básicos en los últimos tres meses y prometió un nuevo endurecimiento ya en diciembre.
Pero los inversionistas empezaron a anticipar una ralentización de las subidas, por el riesgo creciente de recesión.
El BCE se reunirá de nuevo el 15 de diciembre y los datos de la economía en el próximo mes así como las estrategias de la Reserva Federal de Estados Unidos también influirán en su decisión.
rgh/att
