Al término de las conversaciones con su par venezolano, Nicolás Maduro, en el Palacio de Miraflores, sede del Gobierno, y donde firmaron una declaración junta, el mandatario se refirió a que ambos pueblos están mezclados por la historia, una raíz común y por la sangres.
Petro, quien realizó su primera visita a Caracas tras el restablecimiento de las relaciones bilaterales, manifestó que cualesquiera que sean las formas políticas que se adopten en una y otra nación, la amistad de los dos pueblos debe mantenerse.
En su discurso, llamó a reconstruir la frontera de más de dos mil kilómetros que está en manos de las mafias, a las que llamó organizaciones multicrimen y cuyas jefaturas ya son multinacionales.
El presidente neogranadino afirmó que eso es la expresión del fracaso de las guerras contra las drogas que comenzó hace 50 años y dejaron desestabilización democrática, un millón de muertos en América Latina y territorios perdidos tanto para las sociedades como para los Estados.
Anunció en ese sentido, que Bogotá y Caracas acordaron reconstruir las relaciones a nivel de inteligencia para poder golpear, no tanto al obrero del narcotráfico, sino a los dueños del capital que son los que casi nunca se han golpeado y son peligrosos para la estabilidad política.
A su juicio, este tema demanda “una gran conferencia latinoamericana de presidentes” para examinar el fracaso que en las últimas cinco décadas hemos tenido.
Refirió que otros de los asuntos tratados con Maduro fue el de celebrar en Cartagena una reunión de empresarios colombianos y venezolanos para que la frontera recobre su vigor comercial, y ellos mismos construyan los lazos de manera libre.
Explicó que uno de los acuerdos fue el de llevar un esfuerzo común de los países de la región que tienen responsabilidad sobre la selva amazónica a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27) a desarrollarse la próxima semana en Egipto.
Petro comentó la necesidad de llevar una política común a la COP27, porque la defensa de la selva amazónica es fundamental en el equilibrio climático del planeta, el cual está hoy en peligro y si se pierde ese equilibrio, valoró, “desaparece la humanidad del planeta y toda la vida”.
Señaló que ahora queremos invitar a Chile, Ecuador, a Bolivia y Perú para que acepten el reingreso de Venezuela a la Comunidad Andina de Naciones (CAN) con todos los poderes, sus derechos y deberes.
Recordó que la CAN fue la plataforma que permitió de alguna manera la industrialización leve de nuestros países, el balbuceo industrializador, que al debilitarse, atenuó los procesos de crecimiento y terminó en una situación negativa para todos las naciones.
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