En un comunicado de la Coordinadora Nacional de Pueblos Indígenas de Panamá (Coonapip), entregado a Prensa Latina, se precisa que los cinco delegados se sumarán a los representantes del Ministerio de Ambiente (Miambiente), entre otras instituciones.
En su mensaje, la Coonapip destaca que son los pueblos autóctonos los mayores guardianes de la madre naturaleza, de ahí la preocupación por el uso y manejo de sus tierras, flora y fauna.
En la 27ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27), en la ciudad de Sharm El Sheikh, a nombre de todas las comarcas del istmo, los autoridades tradicionales compartirán con sus pares de otras naciones sobre la agenda 2030, enfocados en su propia realidad y cosmovisión, precisaron.
La Coonapip participará en mesas y talleres sobre Recursos Naturales (Bosques y Madre Tierra), Gobernanza y Economía (Buen vivir, producción y seguridad alimentaria, turismo).
Además estará presente en los debates sobre otros asuntos cardinales como Educación, Salud, Vivienda, Fortalecimiento Institucional y de los Organismos Tradicionales (componente de sostenibilidad y género).
El impacto del cambio climático es una realidad para los pueblos indígenas del istmo, especialmente en la costa atlántica y áreas aledañas, afectando directamente territorios en Guna Yala, Ngabe Buglé y áreas Emberá Wounaan, según esa agrupación.
En ese sentido, promoverán alianzas globales, asistencia técnica y financiera a favor de la organización, centrada en soluciones basadas en seguridad territorial, conservación de bosques y biodiversidad, equidad de género, juventud y desarrollo sostenible.
En la COP27, Panamá insistirá en un mayor compromiso de todos los países para disminuir los impactos del cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de forma contundente.
La directora de Cambio Climático de Miambiente, la doctora Ligia Castro, dijo a este medio que la representación este año está compuesta sobre todo por jóvenes, en su mayoría mujeres.
Estaremos presentes en los diversos escenarios de intercambio y negociación, pero clave será transmitir la necesidad de que sobre todo los países ricos, pero también las naciones en desarrollo, nos pongamos a trabajar en equipo para adaptarnos y enfrentar eventos extremos que causan daños y pérdidas millonarias, además de intensificarse e incrementar su frecuencia cada año.
Hacia la COP27, Panamá lleva como carta de presentación su condición de país Carbono Negativo, dijo Castro, a lo que se suman diversas estrategias, como los preparativos de la actualización de la contribución determinada a nivel nacional.
La COP27 se centrará en un conjunto de problemas relacionados con el clima, principalmente la reducción de emisiones, adaptación a los efectos negativos del flagelo y financiación, según sus organizadores.
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