Por Luis Manuel Arce Isaac
Corresponsal jefe en México
El sitio web Manifiesto 21 (https://www.manifiesto21.mx/) dio el alerta y asegura que los ultraderechistas de Estados Unidos y sus invitados tienen programado reunirse los días 18 y 19 de noviembre en la Ciudad de México.
De confirmarse, la CPAC se reuniría exactamente cuatro días antes de la Cumbre de la Alianza del Pacífico, ahora integrada en sus tres cuartas partes por gobiernos progresistas con México, Perú y Colombia, y solo Ecuador alejado de las tendencias dominantes en sus tres socios.
López Obrador quiere convertir esta última en una cita de presidentes, y a tal efecto invitó a los mandatarios de Chile, Gabriel Boric; de Argentina, Alberto Fernández, y de Brasil el electo Luiz Inácio Lula da Silva, de manera que en esos días México hospedará a una parte importante de la izquierda sudamericana.
Manifiesto 21 considera que no es casual el lugar escogido -México- ni la fecha para una reunión de la cual la CPAC no da detalles, ni presentado agenda, ni muchas precisiones como siempre hacen sus multimillonarios miembros en las citas -algunas dos veces en el año- desde 1974, fecha de fundación por la Unión Conservadora Estadounidense, con sede central en National Harbor, Maryland.
No es de extrañar que el discurso central entonces lo pronunciara Ronald Reagan que fue, al mismo tiempo, una plataforma en su campaña presidencial cuando logró su primer mandato (1981-1985) y sentó las bases para iniciar, junto con Margaret Thatcher, de Reino Unido, el nefasto período neoliberal.
El alerta es porque no se trata ni de una reunión ni de un grupo cualquiera. La CPAC reúne desde hace casi medio siglo a líderes del mundo conservador, a cientos de organizaciones, miles de activistas y a millones de espectadores a través de los medios y las redes sociales que domina.
EN MÉXICO, REALIDAD DIFERENTE
De hecho, según Manifiesto 21, más allá de asuntos vitales como la guerra en Ucrania azuzada por Estados Unidos y sus ansiedades por dominar cambios sistémicos en el planeta, están dictando una nueva correlación de fuerzas y factores inéditos de negociación; en el cónclave, México estará en primera fila por ser expresión de una realidad diferente a la de ellos.
Precisamente uno de los slogans conocidos hasta ahora es “¡México! Estaremos aquí defendiendo la libertad de las Américas. Juntos Porque #JuntosSomosMásFuertes”, según su página cpacmx.com.
¿Quién está detrás de esta reunión de CPAC en México?, pregunta la publicación, pero no se aventura a dar una respuesta concreta aunque asegura que no es una casualidad.
Una organización con los idealistas más retrógrados del continente programa reunirse en un México que lleva cuatro años de un gobierno progresista y muy influyente en el resto de América Latina.
Y este gobierno, considera, tiene sobrados motivos para ser blanco de la ultraderecha por logros en tan poco tiempo a pesar del desastre económico, financiero, social y político, y la enorme corrupción dejada en 36 años de neoliberalismo.
México demuestra que sí es posible caminar hacia un mundo mejor, que no resulta un sueño y puede alcanzarse a contrapelo de vecinos tan poderosos y de crisis tan profunda como la sanitaria por Covid-19 y la económica por la bancarrota neoliberal y una guerra como la de Ucrania, que no le es ajena.
También es sintomático, según el sitio web, que la CPAC haga su encuentro en México en los días previos al 20 de noviembre, fecha en la que se conmemora y celebra el inicio de la Revolución Mexicana.
El politólogo y articulista mexicano Mauro Jarquín Ramírez considera que en el país la resistencia al cambio es evidente en la oposición a planes integrales de salud para todos con vistas a hacer realidad de que es un derecho del pueblo y no algo muy lejano como hasta ahora, al igual que la educación.
Por eso atacan tanto a la Cuarta Transformación, que es el programa de gobierno de López Obrador.
OBSESIVO Y ANACRÓNICO DISCURSO DE CPAC
Mas, a pesar de todo su poder, la CPAC tiene una debilidad muy grande, y es que sus miembros carecen de ideas y propuestas y solo les queda la obsesiva y anacrónica cantaleta del anticomunismo, lo cual no les deja más camino que confabularse, pensar en golpes de Estado, golpes blandos, lawfare, y de una forma u otra buscar cómo debilitar, destruir y aplastar el proyecto progresista, afirma Manifiesto 21.
El mejor ejemplo de esto último, agrega, son los contrarrevolucionarios cubanos de Miami, sus patrocinadores y los mercenarios que reclutan, que deliran con una intervención armada por parte de Estados Unidos o que la fuerza del bloqueo económico, las sanciones y el asedio acaben por vencer al heroico pueblo de Cuba y a su Revolución.
No obstante Ana María Aragonés, catedrática de la Universidad Nacional Autónoma de México, advierte como muy preocupante que también en la región se expanda la ultraderecha, el neofascismo.
Señala que eventos muy graves como el intento de asesinato vivido por la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner; el golpe de Estado en Bolivia que derrocó a Evo Morales; la amenaza a México de aplicar aranceles si no cambiaba su política migratoria; la aparición del Partido Vox de España con su carta de Madrid y en los últimos días la realización del Congreso Mundial de las Familias, son amenazas a tomar en cuenta.
Y ese es el contexto en el que se realizará la reunión de la CPAC, de ahí que Morena advierta de la composición de esa conferencia rebosante de xenofobia, racismo y hostilidad, embestida contra conquistas de derechos sociales y laborales, rechazo a derechos humanos y libertades, y conservadurismo de todo tipo y alcance.
Solo para que se tenga una idea del peligro que esa reunión representa para México y cualquier otro país en su mira, la Conferencia Política de Acción Conservadora está integrada por un centenar de grandes organizaciones que la financian.
Entre estas figuran Human Events, Young America’s Foundation y la Asociación Nacional del Rifle, y son capaces de reunir hasta 10 mil participantes en sus foros, las personalidades más importantes de las diferentes corrientes del movimiento conservador estadounidense, políticos con cargos en ejercicio y otros.
Ni siquiera la pandemia de Covid-19 impidió que dieran sus reuniones en vivo, presenciales, en 2020 y 2021, y ya realizaron la primera de este año en febrero en Orlando, Florida, con el expresidente Donald Trump (2017-2021) como principal orador, así como el gobernador de Florida, Ron DeSantis y otros muchos por el estilo.
Por sus micrófonos pasaron desde Reagan hasta George W. Bush, Dick Cheney, Pat Buchanan, Karl Rove, Newt Gingrich, Sarah Palin, Ron Paul, Mitt Romney, Charlie Kirk, Glenn Beck, Rush Limbaugh, Ann Coulter, Allen West, Michele Bachmann, Nikki Haley, Marion Maréchal, Steve Bannon, Kellyanne Conway, Mike Pence, entre otros políticos exageradamente conservadores.
arb/lma
