El superintendente jefe Lázaro Conceição confirmó al Jornal de Angola el saldo de los disturbios en las proximidades del cementerio de Santa Ana, donde tuvo lugar el sepelio del popular cantante y compositor.
El funcionario lamentó el fallecimiento de un menor, del sexo masculino, y las lesiones recibidas por 33 personas, 16 agentes policiales y 17 civiles.
También corroboró, mediante un comunicado de prensa, la detención de 18 individuos y la existencia de perjuicios materiales a causa de robos y ataques a bienes públicos, agregó la reseña digital.
Según la fuente, la Policía se vio obligada a contener un intento de invadir el camposanto capitalino y a dispersar a los infractores del orden.
Además de las secuelas humanas, hubo daños a vehículos policiales y particulares, así como a cinco ómnibus públicos y una comisaría, ejemplificó el reporte.
Para contener los ánimos, los uniformados usaron “granadas de efecto moral y balas de gomas” con vistas a mantener el cordón de seguridad a lo largo de la Avenida Deolinda Rodrigues, que fue cerrada a la circulación desde las primeras horas del día debido a la ceremonia fúnebre, reseñó la agencia de prensa Angop.
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