El mandatario dijo que la nueva fase, la quinta del Plan de Control Territorial (PCT), es denominada “extracción” con la que se piensa apresar hasta el “último terrorista” en las comunidades del país.
La fase cuatro fue una fase de incursión en los territorios y para eso “yo le solicité al ministro de Defensa que duplicáramos la Fuerza Armada. Ya estamos cerca de esa meta y eso nos va a permitir ejecutar la fase cinco”, explicó.
Aun quedan pandilleros, pocos pero aún quedan, y para hacer esa fase cinco más exitosa hemos incluido parte de lo que aprendimos en Comasagua, departamento La Libertad. Nos dimos cuenta del éxito de que cercar delincuentes nos permite capturarlos dentro del cerco, de donde no pueden escapar, agregó.
El presidente comprometió el esfuerzo de las autoridades en extraer a todos los pandilleros que aún siguen delinquiendo en barrios y colonias de El Salvador y para ello se cercarán algunos municipios, precisó.
Esta quinta fase del PCT implementado desde 2019 estará arropada por el estado de excepción prorrogado recientemente por la Asamblea Legislativa a solicitud del gobierno y tiene como principal propósito garantizar la seguridad y la tranquilidad de la población, según indican las autoridades.
Vamos a lanzar la Fase cinco, pero un poco modificada. Tiene dos elementos, uno es la extracción y el otro es, base a lo que se aprendiódurante el régimen, cercar grandes áreas mientras se hace la extracción de pandilleros, explicó el gobernante ante un contingente militar de más de 10 mil soldados, en el cantón Las Granadillas, en Opico.
Las acciones del gobierno permitieron frenar las acciones de las pandillas en el país y ya están detenidos más de 58 mil de sus miembros y presuntos colaboradores, de un estimado de 118 mil, según las últimas cifras divulgadas por el gobierno.
El mandatario puntualizó que esta nueva fase requiere de mucha tecnología e investigación de la Policía Nacional Civil que va a coordinarse con la Fuerza Armada, como lo han hecho a lo largo de ocho meses desde que se implementó la Guerra contra las pandillas y se echó mano del Régimen de Excepción.
Dijo que la política gubernamental tiene apoyo de la población. “Es la correcta, la que funciona y que la gente quiere. Hay soberanía y hay independencia”, remarcó.
Las palabras del mandatario recibieron muestras de apoyo en las redes sociales, a la vez que también llamados a ejecutar un proceso de verificación de denuncias para evitar la detención de personas inocentes, una de las demandas más escuchadas desde la aplicación de la estrategia.
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