Moreno anticipó que los senadores de su partido votarán en contra del dictamen de la reforma electoral o Plan B del Ejecutivo del Movimiento de Renovación Nacional (de Morena).
Al establecer cuál será el comportamiento de los senadores de su partido, reprobó con dureza el contenido de los cambios propuestos en la minuta por el Gobierno.
En el texto se plantea reducir de 500 a 300 los diputados, dejar en 98 los 128 senadores, y que los consejeros y magistrados del Instituto Nacional Electoral (INE) y su Tribunal, los elija el pueblo y no los partidos políticos, y reducir en 250 millones de dólares sus presupuestos incluidos el de los partidos.
Moreno calificó de locura esa reforma que quieren impulsar porque, dijo, rompe la equidad, la transparencia, vulneran al INE y al Tribunal, y eso no se puede permitir.
En tanto, el dirigencia máximo del PAN, Marko Cortés, apuntó que «seguimos firmes, no permitiremos venganzas ni que destruyan nuestra democracia», y reiteró la consigna conservadora de que «El INE no se toca”.
El Gobierno de López Obrador presentó el Plan B en sustitución de la reforma constitucional, vetada por esos dos partidos y el Revolucionario Democrático, con lo cual impidieron las dos terceras partes de los votos, y en cambio on la nueva solo basta la mayoría simple.
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