La propuesta presentada ante el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos en la isla propone recortar la insostenible deuda de la AEE en un 48 por ciento, a aproximadamente cinco mil 400 millones de dólares, y deberá proporcionar la estabilidad financiera necesaria para invertir en un sistema energético moderno, resistente y fiable.
“La quiebra frenó la transformación del sistema energético de Puerto Rico (y) el Plan que radicamos supone un gran paso adelante, pero no el último; seguiremos negociando con los acreedores en la ruta hacia la confirmación por el tribunal”, expresó el presidente de la JSF, David Skeel.
Expuso que cada miembro de la Junta de Supervisión tiene plena consciencia de que los residentes y las empresas tendrán que asumir los pagos de esta deuda reducida a través de su factura de electricidad.
Skeel añadió que “continuaremos nuestro camino hacia la confirmación teniendo esto presente (ya que) la AEE necesita seguir adelante y Puerto Rico electricidad fiable”, lo cual es el objetivo de este plan.
Además, la Junta de Supervisión Fiscal llegó este viernes a un acuerdo en principio con la aseguradora de bonos National Public Finance Guarantee, Corp, sujeto a la documentación de los términos finales.
Actualmente, sostuvo, no hay acuerdo con los tenedores y fiadores de 7,6 mil millones de dólares de otros bonos de la AEE.
El Plan permite a esos bonistas unirse a una clase de acuerdo con una distribución mínima garantizada o unirse a otra que dependerá del resultado del litigio que la Junta de Supervisión reanudó en septiembre para limitar el gravamen de esas personas sobre los ingresos de esa autoridad estatal.
De igual modo, el pleito legal busca limitar severamente la reclamación permisible de aquellos poseedores de bonos sobre la cual se les puede pagar distribuciones.
La clase de acreedores que desea llegar a un acuerdo propone una recuperación mínima del 50 por ciento para los bonistas, sujeto a pagos adicionales, potencialmente cuantiosos, si los que desean litigar no prevalecen contra la AEE.
“La clase de acreedores que desee litigar recibirá distribuciones basadas en las determinaciones del Tribunal sobre dos asuntos principales; la Junta de Supervisión continuará negociando con los acreedores con la esperanza de evitar litigios costosos y prolongados”, estableció en declaraciones escritas.
El Plan de Ajuste de Deuda también propone distribuir entre los acreedores un instrumento de valor contingente, que hipotecará a los consumidores puertorriqueños por los próximos 35 años.
Si la AEE, en proceso de desmantelamiento por el gobierno anexionista de Pedro R. Pierluisi, reembolsa sus nuevos bonos antes de los 35 años previstos, los bonistas recibirían los ingresos de la tarifa de conexión y el cargo volumétrico hasta el año 35, si la autoridad estatal supera las proyecciones de su Plan Fiscal Certificado.
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