La investigación, publicada en The American Journal of Managed Care, señala que los adultos mayores, con bajos ingresos familiares, se saltan la atención de salud debido al costo.
De acuerdo con el sondeo, el impacto financiero es una preocupación importante para los estadounidenses mayores que aún no han alcanzado la edad de elegibilidad para Medicare y no alcanzan los umbrales de ingresos de Medicaid.
“Como médico de urgencias, veo pacientes que llegan más enfermos de lo que hubieran estado si hubiesen recibido atención antes”, dijo en un comunicado la autora principal Rachel Solnick, de la Escuela de Medicina Icahn, en Nueva York.
“Estos hallazgos resaltan la importancia de reducir la cantidad de personas sin seguro y la necesidad de que las aseguradoras comuniquen claramente la cobertura de los servicios de emergencia”, refirió.
Los estadounidenses mayores enfrentan un mayor riesgo de inseguridad económica y alrededor de la mitad no puede pagar los gastos esenciales, escribieron los autores.
Además, a medida que aumenta la cantidad de personas de la tercera edad en el país, se generará una mayor demanda en un sistema de atención médica, que ya está sobrecargado, resalta la investigación.
Los investigadores sugieren que las políticas futuras deben ayudar a reducir los gastos de bolsillo de esta población vulnerable.
rgh/adr