Luigi Montano, presidente de esa entidad, dio a conocer en declaraciones divulgadas este lunes por el sitio digital informativo Affaritaliani las conclusiones de una investigación enmarcada en el proyecto EcoFoodFertility, las cuales muestran que sólo el hecho de vivir en zonas de alto impacto ambiental afecta la reproducción.
El deterioro ecológico incide en la baja fecundidad, con independencia de los estilos de vida y el efecto de contaminantes como plaguicidas, hidrocarburos policilaromáticos, bifenilos policlorados, dioxinas y metales pesados, entre otros.
Estos “tienen una acción antiandrogénica y provocan una baja calidad del líquido seminal”, precisó el urólogo.
Mediante un sistema integrado de biomonitoreo humano se analizó el semen masculino y la sangre y orina de jóvenes homogéneos en cuanto a edad y masa corporal, no fumadores ni bebedores habituales, residentes en zonas contaminadas de Campania, Brescia-Caffaro, Valle del Sacco, Taranto, Módena y Vicenza, dijo Montano.
Esta pesquisa, con una profundidad única a nivel mundial, corroboró de manera contundente los resultados de un estudio internacional que abarcó de 1941 y 2011, según el cual en los países occidentales se redujo el número de espermatozoides de varones fértiles de 113 mil a 41 mil por mililitro, explicó la fuente.
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