La decisión se tomó a pesar de que un grupo de expertos recomendó al Gobierno un incremento de 40 pesos al pasaje (unos cinco centavos de dólar) con el objetivo de compensar el alza de los costos en este sector.
El tema es muy sensible en el país, porque el aumento de 30 pesos en el pasaje del metro durante el gobierno de Sebastián Piñera fue el detonante del estallido social de octubre de 2019, que estuvo a punto de derrocar al ejecutivo.
Desde entonces fue suspendido el habitual incremento anual del precio del transporte público, hasta que a finales del año pasado el ejecutivo anunció un ajuste al alza para 2023, lo cual generó malestar entre la población.
En la actualidad el viaje en metro cuesta 720 pesos y en autobús 800 (entre 83 y 92 centavos de dólar) lo cual resulta caro para las familias donde sus miembros deben hacer entre dos y cuatro recorridos diarios para ir a su trabajo o centro de estudios.
Muñoz puntualizó que el aumento es inevitable, pero se hará de manera gradual, dijo, y en el momento oportuno.
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