A su llegada a El Paso, Texas, actualmente el mayor punto de cruces ilegales, fue recibido por el gobernador republicano Greg Abbott, quien horas antes criticó a la actual administración por no comunicarle con antelación sobre el viaje del presidente.
Abbott le entregó una carta al presidente, cuyo contenido describe cinco formas en que puede abordar la crisis fronteriza, refirió CBS News.
Luego, Biden visitó el puerto del Puente de las Américas, donde los oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza estaban alineados para recibirlo, reseña The Hill.
Se espera que el presidente se reúna con funcionarios fronterizos para discutir la migración, así como el aumento del tráfico de fentanilo y otros opioides sintéticos, que están provocando un aumento vertiginoso de las sobredosis en los Estados Unidos.
También visitará el Centro de Servicios para Migrantes del Condado de El Paso y tendrá encuentros con organizaciones sin fines de lucro y grupos religiosos.
El anuncio de Biden sobre la seguridad fronteriza y su visita a la frontera tienen como objetivo, en parte, mitigar el impacto de las próximas investigaciones sobre inmigración prometidas por los republicanos de la Cámara, aseguran analistas.
Pero cualquier solución duradera requerirá la acción de un Congreso profundamente dividido, donde los múltiples esfuerzos para promulgar cambios radicales han fracasado en los últimos años.
Durante los dos primeros años de su mandato, los republicanos criticaron a Biden por no visitar la frontera antes y por las políticas fronterizas que consideran demasiado indulgentes.
El número de migrantes que cruzan la frontera entre Estados Unidos y México aumentó drásticamente desde que Biden asumió el poder.
Hubo más de 2,38 millones entradas durante el año que terminó el 30 de septiembre, la primera vez que el número superó los dos millones.
Los cambios de política anunciados la semana pasada son el movimiento más grande de Biden hasta ahora para contener los cruces fronterizos ilegales y rechazar a decenas de miles de inmigrantes que llegan a la frontera.
Desde El Paso, Biden continuará hasta la Ciudad de México, donde él y los líderes de México y Canadá se reunirán el lunes y martes para una cumbre de América del Norte.
jha/adr