“Es inaceptable y doloroso ver la cantidad de personas que han muerto en enfrentamientos con la policía en el sur del Perú”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.
Solo en las últimas horas 18 personas perdieron la vida en la región surandina de Puno, en su mayoría por armas de fuego, lo cual elevó a 46 el número de víctimas mortales acumuladas desde la destitución y encarcelamiento del presidente Pedro Castillo.
“El Estado debe siempre resguardar y respetar los derechos humanos”, advirtió Boric en las redes sociales.
Los manifestantes reclaman la destitución de la presidenta Dina Boluarte, elecciones anticipadas y el cierre del Congreso.
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