A través de un comunicado, Berri aplazó la convocatoria de este jueves para el próximo día 19 tras coincidir con la ceremonia fúnebre de Al-Husseini, quien falleció a la edad de 85 años como consecuencia de una influenza aguda.
En la nota, el líder del legislativo libanés significó la estatura patriótica, la defensa de la unidad y la identidad nacional de Al-Husseini, considerado una de las figuras políticas y diplomáticas más importantes en el mundo árabe.
Berri extendió condolencias a los familiares y al pueblo libanés, al subrayar que con su muerte el país pierde un insustituible valor humano, legislativo y de lucha.
En proporción con el triste suceso, el primer ministro interino, Najib Miqati, lamentó el deceso de Al-Husseini, a quién calificó como hito en la historia del trabajo parlamentario en Líbano y referente para la aprobación del Acuerdo de Taif que puso fin a la guerra civil (1975-1990).
Al conocer la noticia, bloques parlamentarios, dirigentes, partidos, organizaciones y líderes religiosos destacaron la honestidad y el liderazgo del expresidente para asegurar la democracia y los equilibrios libaneses en el centro de las reformas constitucionales.
Fundador del movimiento chiita Amal en 1973, Al-Husseini ingresó a la asamblea legislativa de Líbano en 1972 como diputado de la gobernación de Baalbek-Hermel y presidió la institución de 1984 a 1992.
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