Todos los diarios impresos y sus versiones digitales, la radio, la televisión, y las redes sociales, han derrochado simpatías por Del Toro y su premio, considerado uno de los mejores y más exitosos cineastas del México contemporáneo.
Aunque también ha habido mucho elogio para el veterano Steven Spielberg quien se coronó como el rey de la noche en la edición 80 de la entrega de premios, que trató de reivindicar a la Asociación de Prensa Extranjera en Hollywood.
Gracias a este premio, Del Toro se convirtió en el primer latinoamericano en ganar la categoría de Película Animada en los Golden Globe, coinciden en destacar las crónicas de los especialistas nacionales.
“Estoy muy agradecido y estoy más que feliz por muchas razones, una de ellas, por poder estar aquí en persona, estamos de vuelta. Algunos estamos borrachos y qué podría ser mejor que eso”, declaró el tapatío al recibir el trofeo.
Estimó que ha sido un gran año para la animación porque la animación es cine y no es un género para niños, sino que es un medio, y dedicó el premio a su esposa Kim y a Jennifer, compañera de su codirector Mark Gustafson.
También a todos los animadores que participaron en esta cinta que él definió como una historia sobre la vida, la pérdida y la pertenencia.
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