Así lo reconoció el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Fernando Mattos, quien recorrió varias zonas y escuchó a productores del campo que atraviesan una difícil coyuntura por el déficit hídrico.
La consecuencia lógica es que va a haber menos oferta de productos frescos de frutas, verduras y hortalizas en las próximas semanas. La fruta que llegue de algún productor que disponga de agua va a estar más cara y va a haber una oferta abundante de producción de menor calidad», dijo el titular del MGAP en declaraciones a la prensa.
Mattos indicó que podrían habilitarse permisos de importación para asegurar el abastecimiento de algunos alimentos.
El gobierno uruguayo declaró a fines de octubre la emergencia agropecuaria por sequía y estudia extender su aplicación.
La medida incluye el otorgamiento de préstamos, que algunos agricultores manifiestan tener problemas para pagar por los altos gastos productivos debido a la seca.
Según Mattos, la situación agropecuaria «se viene agravando» en los últimos días por el déficit hídrico que sufre el territorio nacional.
Sectores agropecuarios reiteran su preocupación a las autoridades y los reportes indican disminución en la producción de leche, e incluso la muerte de cabezas de ganado en el departamento de Artigas, en la frontera con Brasil, entre otras afectaciones.
jcm/ool