El republicano Solomon Peña está acusado de conspirar y pagar a cuatro hombres para que llevaran a cabo cuatro tiroteos sin lesiones en las casas del área de Albuquerque de dos comisionados del condado de Bernalillo y dos legisladores estatales, detalló en un comunicado la Policía de Albuquerque.
La información añadió que el sospechoso podría haber estado motivado por la ira adquirida después de su derrota en los comicios de medio término del pasado noviembre, atribuida por Peña a un supuesto fraude electoral.
El conservador perdió su desafío a la Cámara estatal ante el demócrata titular Miguel García, tras lo cual llevó su caso a tres comisionados del condado y a un senador estatal, algunos de ellos blanco de los tiroteos, afirmó el portavoz de la Policía, Gilbert Gallegos, citado por la cadena de noticias NBC News.
por su parte, el alcalde de Albuquerque, Tim Keller, describió los ataques como producto del extremismo político.
“Este radicalismo es una amenaza para nuestra ciudad, nuestro estado y nuestra nación. Seguiremos luchando contra el odio en todas sus formas y deteniendo la violencia política”, tuiteó.
Los detectives alegan que Peña pagó en efectivo a otros cuatro hombres y les envió un mensaje de texto con las direcciones donde quería que estallaran los disparos.
Un reporte difundido en el diario Albuquerque Journal informó durante la campaña del año pasado sobre los antecedentes penales de Peña, que le llevaron a cumplir casi siete años de prisión por robo.
Asimismo, es un firme partidario del expresidente Donald Trump (2017-2021), quien alegó fraude electoral tras su derrota en los sufragios de 2020, una acusación hasta la fecha sin fundamento.
Según alertó recientemente el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, la radicalización de las ideologías de derecha es la principal amenaza terrorista del país.
Un artículo divulgado por el periódico The New York Times acotó que de los más de 440 asesinatos ejecutados por extremistas en la última década, más del 75 por ciento fueron cometidos por ultraconservadores, supremacistas blancos o fanáticos antigubernamentales.
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