La agenda con Biden venía siendo negociada desde el período de transición y la ratificación del viaje oficial fue hecha también el miércoles por el propio Lula durante un evento en el Palacio del Planalto, sede del Poder Ejecutivo en esta capital.
«Estoy aquí para construir, reconstruir nuestra imagen en el exterior. Por cierto, el domingo voy a Argentina, el día 10 voy a Estados Unidos, en marzo voy a China», adelantó el gobernante.
Minutos después comunicó que recibirá además en el gigante suramericano a los líderes de Alemania, Olaf Scholz, y de Francia, Emmanuel Macron.
«Haremos que Brasil vuelva a ser protagonista internacional y respetado», remarcó.
Durante una entrevista concedida esta semana a la televisora GloboNews, el exsindicalista corroboró asimismo que irá a ver a Biden y «quiero saber cómo enfrenta la situación, porque por la prensa que leo, me parece que los republicanos se están fortaleciendo».
Parece, añadió, que «el discurso radical se está fortaleciendo y me parece que los demócratas lo están pasando un poco mal y van a tener elecciones dentro de dos años».
Estados Unidos será el tercer país visitado por Lula en su tercer mandato.
Primeramente, estará en Buenos Aires, Argentina, del 23 al 24 de enero, para reunirse con el presidente Alberto Fernández y participar en la VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
El día 25, el extornero mecánico irá a Montevideo, Uruguay, para cumplir una visita oficial a la vecina nación.
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