Según el sitio, habló con el exmilitar, quien confirmó la necesidad de la intervención.
Todavía no hay fecha definida para el procedimiento, pues la decisión será del doctor Antonio Macedo, médico del exjefe de Estado.
La nueva intervención quirúrgica tendrá el objetivo de resolver la adherencia del intestino, consecuencia del atentado sufrido hace cinco años, de acuerdo con el galeno.
El político de tendencia ultraderechista pasó por seis cirugías como resultado de la puñalada recibida en 2018 durante la campaña electoral.
Fueron cuatro en el calendario del atentado y dos en 2019 para la retirada de la bolsa de colostomía y la corrección de una hernia en la incisión de la operación.
El último ingreso del excapitán del Ejército fue en julio de 2021. En ese momento, estuvo hospitalizado durante cuatro días por un cuadro de obstrucción parcial del intestino delgado.
De acuerdo con el blog, a principios de mes, Bolsonaro fue internado en un hospital en Orlando, Florida, después de quejarse de «fuertes dolores abdominales».
La fuente señala que el exgobernante suele tener problemas recurrentes de mala digestión por dos razones: la puñalada que sufrió y la indisciplina con una dieta alimentaria saludable. Según cercanos, se sale de la línea con frecuencia.
Bolsonaro permanece en Estados Unidos desde finales de diciembre, cuando viajó antes de dejar el cargo oficialmente. No asistió a la ceremonia de asunción al poder de su sucesor Luiz Inácio Lula da Silva y por ende descartó entregarle la faja presidencial.
Investigado en el país por los actos vandálicos y golpistas de un grupo de sus adeptos radicales el 8 de enero en esta capital, el expresidente enfrentará además otros posibles procesos por el genocidio del pueblo indígena Yanomami, sumido en una grave crisis social y sanitaria.
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