Las declaraciones de emergencia nacional y de salud (PHE, en inglés) por el Sars-Cov2 están vigentes en el país desde enero de 2020, pero los especialistas creen que lo peor de la pandemia ya pasó, de acuerdo con un comunicado de la Casa Blanca circulado en The Hill.
Esta medida de la administración de Joe Biden es además una declaración de oposición a dos proyectos de ley del Partido Republicano que se someterán a votación en la Cámara esta semana y que pondrían fin de inmediato al estado de emergencia, según la cadena CBS.
Pero con una mayoría demócrata en el Senado y un veto del presidente Joe Biden, los proyectos parecen principalmente de naturaleza simbólica, diseñados para dejar constancia del descontento de los legisladores republicanos con el PHE en curso, que se renovó el 11 de enero.
La Casa Blanca señaló que las legislaciones propuestas «crearían un gran caos e incertidumbre en todo el sistema de atención médica: para los estados, hospitales y consultorios médicos y, lo que es más importante, para decenas de millones de estadounidenses».
Con este anuncio la actual administración cumple con la notificación anticipada de más de 60 días para que los proveedores de atención médica y las partes interesadas tengan tiempo para prepararse, destaca CBS.
Las flexibilidades que se promulgaron bajo el PHE permitieron a los beneficiarios de Medicare recibir pruebas y tratamientos gratuitos de Covid-19 en el hogar y no pagar costos compartidos.
Igualmente proporcionó fondos y recursos del Departamento de Salud y Servicios Humanos a los sistemas de salud y hospitales estatales y públicos, así como el despliegue de suministros médicos y vacunas.
La terminación del PHE también significará el cierre del Título 42, política implementada en la era de Donald Trump (2017-2021), que permite a los funcionarios fronterizos expulsar a ciudadanos extranjeros e ignorar las solicitudes de asilo en aras de la protección de la salud pública.
Por otra parte, los especialistas señalan que el cierre de la emergencia no significa el fin de la responsabilidad individual, pues este coronavirus continúa circulando en el país.
La pasada semana, los Centros para el Control de Enfermedades (CDC en inglés) registraron tres mil 756 nuevas muertes atribuidas a la Covid-19 e igual número de hospitalizaciones en el mismo período.
Se estima que más de 1,1 millones de estadounidenses murieron a causa de la enfermedad, según los CDC.
Desde que fue declarado por primera vez, el 31 de enero de 2020, por el exsecretario de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, el PHE nacional se renovó 12 veces bajo dos administraciones diferentes.
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