Según declaraciones del miembro del Consejo de Gobierno del BCE y gobernador del Banco de Italia, Ignazio Visco, en el actual contexto un endurecimiento excesivo de la política monetaria tendría «graves consecuencias» para la actividad económica y la estabilidad financiera.
Durante la conferencia anual de la asociación italiana de mercados financieros Assiom-Forex., insistió en que, a la hora de equilibrar las decisiones sobre las tasas, este riesgo tiene el mismo peso que un endurecimiento demasiado gradual.
«El endurecimiento de la política puede continuar ahora con la debida cautela, evaluando de manera cuidadosa las implicaciones para la economía y las perspectivas de inflación de las medidas que ya se han adoptado», destacó.
La autoridad financiera europea anunció esta semana un alza de 50 puntos básicos en su tasa oficial y la dejó en un 2,5 por ciento. Anunció también que repetiría esta medida en marzo.
El BCE mantuvo abiertas sus opciones sobre medidas posteriores a marzo, suscitando dudas entre los inversores sobre el alcance de nuevas alzas.
Hasta el momento, inversores y economistas prevén un máximo de la tasa de depósito de entre el 3,25 y el 3,5 por ciento, lo que sugiere sólo uno o dos movimientos tras el incremento de marzo y uno final a mediados de año, pero con las nuevas declaraciones esto podría cambiar.
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