El organismo oficial investigativo señaló que, a pesar de que desde hace más de una década se estableció en la Constitución que ningún servidor público puede ganar más que el Presidente de la República, en el INE eso no se respeta, pero tampoco en la Suprema Corte de Justicia, informó el titular de la UIF, Pablo Gómez.
En el caso de los ministros de la Suprema Corte dijo que es más ofensivo porque son impartidores de justicia y guardianes de la ley, además de ser una arrogancia porque ellos se autoasignan los sueldos.
Gómez apuntó que la ley de remuneraciones aprobada en el presente sexenio no deja “escapatoria ni resquicio”. No obstante, van en un recurso a la Corte los del INE, pidiendo que no se aplique el presupuesto federal en lo que toca a los sueldos en el instituto, nada más.
Explicó que luego de que el máximo tribunal del país admitió la suspensión, ésta se mantiene porque el asunto no se resuelve en el fondo.
Dejan pasar el tiempo en la Corte, llega un momento en que ya nada de eso funciona porque el presupuesto ya se acabó, ya dejó de funcionar. Viene el nuevo año, un nuevo presupuesto y, lo mismo, lo impugnan, se les da la suspensión.
No es correcto que nadie, en el país que sea, por más poder que tenga, decida cuánto va a ganar, no es correcto, es algo ofensivo contra la República, dijo el funcionario.
No es un asunto de grillas, no interesa tanto lo que se están embolsando, lo que importa es que esa arrogancia de autoasignación del sueldo es un golpe brutal al sistema democrático republicano que debería de haber en una nación”, agregó.
El presidente de la República gana un poco más de 100 mil pesos mensuales, unos cinco mil 500 dólares, mientras que el consejero presidente del INE devenga más del doble, al margen de las también millonarias prestaciones sociales y gastos de representación.
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