“Recordamos 144 años de la invasión chilena a Antofagasta, que arrastró a nuestro país a un conflicto bélico entre pueblos hermanos en el que se perdieron miles de vidas. Honor y gloria a nuestras heroínas y héroes que defendieron el Litoral boliviano con valor y patriotismo”, escribió Arce en un tuit.
Al referirse a la agresión de las tropas del país vecino contra el puerto boliviano de Antofagasta, el líder del Movimiento al Socialismo-Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos reafirmó “el derecho soberano e irrenunciable de Bolivia de recuperar su salida al Océano Pacífico”.
“El mar debe unirnos, no dividirnos. Bolivia y Chile somos pueblos hermanos”, sostuvo Morales en su cuenta de Twitter.
La nación andino-amazónica logró la independencia el 6 de agosto de 1825 con una costa de aproximadamente 400 kilómetros sobre el océano Pacífico.
Sin embargo, sin previa declaración de guerra, fuerzas chilenas invadieron el 14 de febrero de 1879 el puerto boliviano de Antofagasta, con lo cual violaron el tratado de límites entre ambos Estados.
Ese acontecimiento dio inicio a la denominada Guerra del Pacífico, que se extendió hasta 1884, cuando las partes rubricaron una tregua bajo la lógica de abordar más adelante el tema.
Como resultado, las tropas chilenas ocuparon el hasta entonces territorio nacional boliviano y privaron al país altiplánico de su acceso soberano al mar.
La disputa bilateral por este tema data de 1828, cuando la Constitución chilena estableció que su territorio llegaba hasta el despoblado sector de Atacama, disposición que terminó con la invasión del lugar en 1879.
En 1904, ambas naciones firmaron un Tratado de Paz y Amistad con el cual ponían fin al conflicto, y en el que reconocían de manera definitiva y permanente la soberanía chilena sobre Antofagasta.
Chile, por su parte, garantizaba el libre tránsito de bienes bolivianos sin impuestos, entre los puertos chilenos y Bolivia, así como la construcción del Ferrocarril Arica-La Paz.
Sin embargo, el Gobierno boliviano denunció de manera reiterada el incumplimiento del Tratado, debido a que no se respeta en toda su extensión, lo cual considera injusto.
Ante tal situación, Bolivia presentó una demanda en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, que el 1 de octubre de 2018 concluyó que no existe obligación por parte de Chile de negociar una salida soberana al mar con Bolivia.
Igualmente, recomendó que las partes establecieran conversaciones en busca de un entendimiento.
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