En el cierre de la clasificatoria de Asia y Oceanía, el quinteto Cedars enrumbó su destino hacia la urbe de Bulacán para enfrentar el viernes al anfitrión Filipinas y luego continuar viaje a Christchurch con el objetivo de rivalizar el lunes ante Nueva Zelanda.
La selección libanesa encarará ambos duelos sin su referente ofensivo Wael Arakj, quien tomará un descanso, tras una temporada intensa con el club local Al-Riyadi, monarca recientemente en la edición 32 del Torneo Internacional de Dubái y con accionar en la Superliga regional.
El conjunto nacional, bajo las órdenes de Jad Al-Hajj, se convirtió en el primer elenco árabe en asegurar su cupo hacia la justa de la FIBA, programada entre el 25 de agosto y el 10 de septiembre en varias ciudades de Japón, Filipinas e Indonesia.
La representación levantina lidera la ventana en la llave E con nueve éxitos en 10 salidas, incluidas las sonrisas de la segunda fase ante Filipinas (85-81), Nueva Zelanda (77-65) e India (95-63, 103-74).
En la primera ronda, los libaneses dominaron el apartado C al barrer a Indonesia (96-38, 110-64) y Arabia Saudita (81-68, 90-60) y dividir frente a Jordania (63-74, 89-70).
Puesto 42 del ranking de la FIBA, Líbano enfoca sus estrategias hacia su cuarta asistencia mundialista, luego de intervenir en las versiones de Estados Unidos (2002), Japón (2006) y Türkiye (2010).
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