El proyecto llevará a la creación de puestos laborales e ingresos, además de contribuir a aumentar la resiliencia medio ambiental de la región y mitigar los impactos negativos de la planta acuática, según los entes coordinadores.
Durante este año, colaboraremos con otras instituciones de los sectores público y privado en trabajos a escala de laboratorio y ensayos de campo para desarrollar prototipos de productos adecuados a partir del alga llamada científicamente Sargassum para su uso comercial, agregaron.
El CRFM y la institución neozelandesa completaron con éxito la primera fase, durante la cual incluyeron socios de Barbados, Belice, Jamaica y la República Dominicana para realizar pruebas de seguridad de la materia prima.
El equipo implicado revisó los posibles productos que podrían elaborarse a partir del sargazo y ahora centran sus esfuerzos en la etapa de desarrollo y sus procesos.
Las floraciones de la planta acuática en el Atlántico comenzaron, y se espera que inunden la región el próximo mes de abril.
Un informe de la estadounidense universidad del sur de Florida divulgó el 1 de febrero que la cantidad total del alga en los mares caribeños de diciembre de 2022 a enero de 2023 se duplicó 8,7 millones de toneladas, nuevo récord.
Expertos califican la afluencia del sargazo como una pesadilla para el Caribe desde 2011, e indicaron que la biomasa de la planta continuará acumulándose y migrando hacia el oeste durante los meses venideros.
Identificaron el cambio climático entre los principales factores que contribuyen a este fenómeno, con mayor impacto en las comunidades cercanas al mar y empresas, especialmente las de los sectores pesquero y turístico.
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