El académico Jaime Flores señaló en su más reciente artículo en el matutino El Periódico de Panamá, que en los últimos siete años, Ortega se dedicó a difundir en foros y seminarios aspectos relevantes de la cultura e historia de la hermana nación centroamericana.
El historiador recuerda que una de las últimas obras, fruto de su iniciativa, fue la inauguración en la Universidad de Panamá de un monumento dedicado a Augusto César Sandino, general de hombres y mujeres libres.
En ese recinto, agregó Flores, una placa conmemorativa recuerda a la veintena de panameños caídos de la Brigada Victoriano Lorenzo, que combatió al lado del Frente Sandinista de Liberación Nacional para derrocar la dictadura de Anastasio Somoza.
Homenajes permanentes a distintos héroes como Carlos Fonseca y Rubén Darío formaron parte de la agenda de un diplomático activo en sus nexos con diferentes organizaciones populares, cívicas e instituciones públicas, subrayó.
Ortega supo resaltar el desarrollo en materia política, social y económica de Nicaragua, a pesar de las sanciones impuestas por los Estados Unidos, remarcó el analista.
Por otro lado, varios colectivos populares y sociales de Panamá con los cuales Ortega mantuvo estrechos lazos, aseguraron que siempre verán en él a un amigo y un revolucionario consecuente.
En sustitución de Ortega, se conoció, el gobierno nicaraguense a través del acuerdo ministerial 10-2023, nombró a Consuelo Sandoval como ministra consejera con funciones consulares.
mem/ga