Como región, a consecuencia de los efectos del cambio climáticp y los fenómenos extremos, la fiabilidad del abastecimiento de ese líquido vital se está convirtiendo en un asunto cada vez mayor, afirmó.
“El saneamiento también es un área de preocupación, ya que gran parte de nuestros residuales van sin tratar al medio ambiente», reflexionó el jefe de Gobierno.
Al pronunciar virtualmente el discurso de apertura del Simposio Científico del Caribe sobre el Agua, Mitchell advirtió que es poco probable que el Caribe cumpla con el objetivo global a menos que el progreso se acelere significativamente.
Está claro que debemos esforzarnos más para crear resiliencia y sostenibilidad social, financiera y medioambiental en nuestras sociedades, comentó.
Sobre el lema de la reunión «Conservación e innovación: Cambiando el paradigma regional del agua», señaló que esas dos primeras variables, trabajando codo con codo, serán fundamentales para lograr una seguridad hídrica sostenible para la economía, la población y el medio ambiente.
El nuevo reto encierra un enorme potencial para la innovación, el espíritu empresarial y la creación de empleo, remarcó el primer ministro.
Mencionó los ámbitos de la captación y el tratamiento del agua, las infraestructuras hídricas inteligentes y la creación de nuevos mercados para productos y servicios sostenibles, entre otros.
Comprender los retos de la sostenibilidad, el cambio climático y los aspectos prácticos de cómo responder no es sólo responsabilidad de los gobiernos, sino de todos, enfatizó Mitchell.
Una Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo efectuada en Río de Janeiro, Brasil, en junio de 1992, propuso celebrar cada año en esta fecha el Día Mundial del Agua, con el objetivo de crear conciencia e inspirar acciones para abordar la crisis hídrica y el saneamiento.
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