Se trata de Edmundo Jacobo Molina, secretario Ejecutivo del INE, quien presentó sorpresivamente la víspera su renuncia de carácter irrevocable, la cual se materializará el próximo lunes 3 de abril, según anunció.
Legisladores de Morena consideraron que se trata de una maniobra bien urdida por el aun secretario ejecutivo quien luchó a brazo partido para ser reinstalado en su puesto cuando a principios de mes fue destituido de acuerdo con las reformas a leyes electorales secundarias denominada por la oposición Plan B del gobierno.
Molina fue el primero en ser destituido por una historia de sometimiento, presuntas malversaciones y corrupción, así como supuesto autor de fraudes en el ejercicio de su trabajo.
Pero aparentemente, al ser destituido se afectaban sus ingresos por finiquito del cargo y otras muchas prebendas, y aunque sus superiores del INE, Lorenzo Córdova, presidente, y Ciro Murallama, vice, argumentaron que su defenestración fue una injusticia, lo cierto es que ahora recupera más de medio millón de dólares solamente por dejar el cargo.
El representante de Morena en el INE, Mario Llergo, compartió un documento en el que se detalla que Jacobo recibirá 10 millones 504 mil pesos (552 mil 842 dólares) por compensación de 14 años de trabajo, de finiquito de la actividad, y la mayor suma, 430 mil 473 dólares, de seguro de separación individualizado.
El Tribunal Electoral, y en particular un solo juez de la Suprema Corte de Justicia, revocaron las reformas a las leyes y plantearon regresar al momento anterior a su aprobación por el Congreso de la República, en clara violación de los constituido en cuando a las funciones de los poderes del Estado.
El Poder Ejecutivo impugnará la decisión de la Suprema Corte de Justicia, según anunció la Fiscalía General.
Molina es el tercer hombre en jerarquía del INE pues su cargo de secretario Ejecutivo es medular ya que no solo es el representante jurídico sino cabeza de la operación de oficinas centrales con estatales y distritales, apuntan medios de prensa.
Por tanto, es jefe de las direcciones ejecutivas, unidades técnicas y demás. También encabeza – junto con Córdova- la Junta General Ejecutiva y es responsable del cumplimiento de los acuerdos del consejo general.
El presidente Andrés Manuel López Obrador, tras acusarlo de ser un hombre que forma parte de la camarilla que controla al INE, reprobó su restitución como secretario ejecutivo y denunció los magistrados de aprobar una suspensión definitiva de su destitución que lo llevó de nuevo a su cargo hace menos de un mes y al cual hoy renuncia.
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