Un portavoz parlamentario indicó este miércoles, en declaraciones divulgadas en el sitio informativo digital Enti Locali Online, que en la Cámara de Diputados se analizará en esta jornada el asunto, sobre la base de los resultados de una reunión gubernamental efectuada el martes último, en la cual se determinó la necesidad de esas gestiones.
La emergencia en Túnez estuvo en el centro de ese foro, presidido por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, en el cual se evaluaron acciones para enfrentar la actual crisis migratoria, con un plan de nueve puntos que incluye un trabajo diplomático para convencer al gobierno tunecino y al FMI para llegar a un acuerdo.
Con esas acciones, que estarán a cargo principalmente del ministro de Asunto Exteriores, Antonio Tajani, se tratará de lograr la estabilización económica y social en la nación norafricana para “evitar una afluencia de inmigrantes que sería difícil de administrar solo para Italia sino para todo el continente”.
En tal sentido, se prevé una próxima visita a Roma del canciller tunecino, Nabil Ammar, para un encuentro con Tajani, durante el cual se abordará este tema, precisó la fuente.
Afectado por una seria crisis económica, Túnez lleva meses negociando un préstamo con el FMI, pero sin llegar aún a un acuerdo, debido principalmente a que esa institución financiera demanda a cambio de la entrega de un nuevo préstamo por mil 900 millones de dólares, la realización de reformas y recortes del gasto público.
Esas medidas, en consideración de las autoridades del país, podrían tener duras consecuencias para los tunecinos, ya envueltos desde hace meses en una espiral de inflación y de escasez de productos básicos.
El comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, demandó a fines de marzo que Túnez acelere las negociaciones con el FMI, a la vez que aseguró la disposición de la Unión Europea de apoyar a esa nación “para que pueda llevar a buen término su proceso de reforma y desarrollo”.
Durante la reunión del gobierno italiano efectuada el 4 de abril, se evaluó la firma e implementación de convenios de cooperación con los gobiernos de Túnez y Libia, principales países de embarque de migrantes hacia Europa por el Mediterráneo central, con el propósito de tratar de frenar el aumento de esas salidas.
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